Lima, 5 ago (EFE).- La exposición «Baldomero Pestana. Retratos peruanos», que reúne más de 50 imágenes de personajes ilustres del siglo XX hechos en los años sesenta en Lima, fue inaugurada hoy en el Museo de Arte Contemporáneo (MAC) de la capital peruana, casi un mes después del fallecimiento del artista español.
Pestana, quien murió en España el pasado 7 de julio, a los 97 años, apoyó la preparación de esta muestra, que ha sido curada por la peruana Fietta Jarque y el español Alejandro Castellote, según informaron a Efe sus organizadores.
Jarque destacó que la exposición, que se presentará hasta septiembre próximo, «es casi un álbum familiar para los peruanos» porque «la lista de fotografiados además de su calidad, es una galería de la cultura» del país.
«Es una forma para los peruanos de ver a todos estos personajes, que vivieron en la misma época juntos y valorar el trabajo de escritores, artistas plásticos, pensadores y políticos», añadió a Efe.
Entre los retratados puede encontrarse a los escritores Martín Adán y José María Arguedas, los artistas plásticos Fernando de Szyszlo y Milner Cajahuaringa, y a políticos y pensadores como Víctor Raúl Haya de la Torre, Jorge Basadre y Honorio Delgado.
Una curiosidad de la muestra, según Jarque, es que muchas de las fotografías retratan a los personajes cuando aún eran jóvenes y Pestana «no sabía si continuarían en carrera» y adquirirían fama.
Los retratos corresponden al trabajo realizado por el fotógrafo durante los diez años (1957 y 1967) en que vivió junto a su esposa Velia en Perú, cuya nacionalidad también poseía.
«Una de las fotografías que me da más que pensar es la de José María Arguedas, que está sentando junto a una pared vacía, un librito y sus anteojos, esta foto es un retrato del alma del escritor», detalló la curadora.
Durante la exposición se presentará el libro de los retratos de Pestana, que ha sido patrocinado por el banco BBVA Continental, además del documental «La imagen Reb/velada», de la española Andrea Vázquez García.
Jarque recordó a Baldomero Pestana como «un hombre modesto que sabía que sus fotografías eran buenas, pero no tuvo ambición de fama aunque como fotógrafo captó al individuo».