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Montevideo, 20 jul (EFE).- Una posible reforma de la Constitución uruguaya enfrenta al bloque de izquierdas gobernante, el Frente Amplio (FA), a favor de la misma, y a los partidos de la oposición, cuya opinión varía sobre esta necesidad y sobre los aspectos a modificar, informaron hoy a Efe fuentes partidarias.
El oficialismo uruguayo ha manifestado en los últimos meses, a través de sus líderes políticos, el deseo de modificar algunos aspectos de la Constitución, cuya última modificación data de 2004.
Para cumplir con esta tarea, el FA creó una comisión asesora para recibir las diferentes propuestas, que ya han presentado algunas de los partidos que componen la coalición.
El coordinador de esta comisión, Felipe Michelini, explicó hoy a Efe que el objetivo es poder «analizar todas las propuestas como partido» en septiembre u octubre de este año.
Si bien se han presentado algunas ideas que son opuestas entre los grupos políticos del FA, Michelini afirmó que «hay acuerdos en materia de derechos humanos, en materia de legislación rural y en materia de normas de protección al medio ambiente».
Sin embargo, líderes de la oposición, como el presidente del Partido Nacional y senador, Luis Alberto Heber, se han mostrado contrarios a esta idea.
En este sentido, Heber declaró hoy que su partido entiende que «no es necesaria una reforma constitucional» y que existen «temas que son más que urgentes para atender» antes que una posible reforma.
Asimismo, afirmó que se debería discutir sobre la realidad económica del país en donde afirmó que el partido que encabeza ha visto y palpado una situación de crisis que les preocupa en referencia a temas como el «alto desempleo», la competitividad, el sector agropecuario, el comercio y la industria.
Desde el Partido Colorado, el secretario general y diputado, Germán Cardoso, señaló a Efe que el tema no ha sido analizado a nivel partidario ya que a su juicio el FA no ha presentado «una propuesta concreta».
Por su parte, el presidente del Partido Independiente y también senador, Pablo Mieres, afirmó que ve «con buenos ojos» iniciar un proceso de diálogo, aunque aclaró que deberá consistir en un «procedimiento que implique un acuerdo político entre todos los partidos».
A su vez, señaló que el partido cuenta con una comisión, integrada por dirigentes de todo el país, que aborda el tema y discute algunas ideas generales, entre las que se encuentra la posibilidad de implementar un «régimen parlamentario al estilo europeo» que cuente con un Jefe de Gobierno y un Jefe de Estado.
«Hay un tiempo político clave» declaró el exsenador Michelini, quien afirmó que, de no presentarse un proyecto para diciembre de este año, se perderán las posibilidades de implementar la reforma.
La Constitución de 1830 sigue vigente en Uruguay a pesar de que ha sufrido varias reformas, siendo la de mayor calado la realizada en 1967, que no supuso el establecimiento de una nueva Carta Magna.
Desde 1967 se han producido cuatro modificaciones más: una en noviembre de 1989, otra en el mismo mes de 1994, la siguiente en diciembre de 1996 y la última en octubre de 2004.