miércoles, 22 de julio de 2015
Empresario argentino afronta la devolución del polémico aval del caso Pluna

Montevideo, 22 jul (EFE).- El empresario argentino Juan Carlos López Mena, dueño de la naviera Buquebus, está afrontando la devolución del aval de 13 millones de dólares que el Banco República de Uruguay otorgó en 2012 a la aerolínea española Cosmo para comprar los aviones de la quebrada Pluna en una operación que no fructificó.
«Esa operación se sigue amortizando. Va a pagar seguramente en este mes una cuota. Las cuotas vencen en enero y julio y desde el punto de vista de la relación con el banco no ha habido ninguna dificultad», explicó hoy en Montevideo en declaraciones a la prensa el presidente del Banco República, Julio César Porteiro.
Hasta ahora, según Porteiro, el empresario ha pagado 3,2 millones de dólares divididos en cuatro cuotas semestrales.
El Parlamento uruguayo aprobó en 2012 durante el Gobierno de José Mujica (2010-2015) la liquidación de la tradicional aerolínea estatal uruguaya, que en 1994 se transformó en sociedad mixta, debido a la crítica situación financiera de la empresa, y poniendo especial relevancia a la venta de siete aviones de los que el Gobierno uruguayo salió como garante.
En dicha subasta, realizada en octubre de 2012, Cosmo se hizo con siete aviones de Pluna por 137 millones de dólares.
Sin embargo, pronto empezaron a surgir sospechas debido a que Cosmo era una empresa desconocida en el sector y no tenía capital ni para pagar el aval necesario para ir a la subasta.
Dos días después de la subasta, López Mena, el ministro de Economía de entonces, Fernando Lorenzo (2010-2013), y el representante de Cosmo, que resultó ser un exempleado y amigo del empresario, fueron vistos comiendo juntos en un restaurante.
Luego se supo que Cosmo pagó el aval de 13 millones de dólares de la subasta con un préstamo del Banco República, presidido por Fernando Calloia y otorgado a pedido de Lorenzo y con una empresa vinculada a López Mena como responsable subsidiaria.
Envuelta en el escándalo y las irregularidades, la compra se cayó y López Mena se vio obligado en un primer momento a asumir el pago del aval, que amenazó con no pagarlo.
La concesión de ese aval generó una operación que terminó en fracaso y con indicios, según la Justicia, de que Calloia y Lorenzo cometieron «excesos sobre el marco legal de sus funciones», por lo que fueron procesados con prisión.
Lorenzo entregó su renuncia como ministro al presidente Mujica y Calloia dimitió de su cargo en el BROU, en el marco de una serie de enrevesadas investigaciones que duran hasta hoy.
En noviembre de 2013, la Suprema Corte de Justicia de Uruguay declaró inconstitucionales varios artículos de la ley de liquidación de la aerolínea uruguaya Pluna en 2012.
El actual presidente del BROU explicó hoy que cuando se declaró la inconstitucionalidad del remate (de Pluna), López Mena dijo que todo lo que estaba asociado a esa transacción del aval perdía su valor y que no estaba dispuesto a pagar la deuda con el banco.
«Pero seguramente hablando con sus abogados o reflexionando de vuelta no tomó esa decisión. Nunca planteó en la Justicia que el no era deudor del BROU», añadió Porteiro.
López Mena, nacionalizado uruguayo, es propietario de Buquebus, la naviera que opera el transporte fluvial entre Argentina y Uruguay.