jueves, 27 de agosto de 2015
Exguerrillero retenido en Uruguay está convencido de que no irá a la cárcel

Montevideo, 27 ago (EFE).- El exguerrillero Héctor Amodio Pérez, que fue denunciado al volver a Uruguay tras 42 años en España por su supuesta complicidad en detenciones y torturas durante la dictadura uruguaya (1973-1985), consideró que esta situación en Europa hubiera sido «impensable» y se mostró convencido de que no irá a la cárcel.
Una estancia en principio prevista de dos días para presentar en Montevideo un libro con su versión de la guerrilla que integraron, entre otros, el expresidente del país José Mujica, acabó con las fronteras del país cerradas y con el exguerrillero declarando en los juzgados, en libertad pero sin poder abandonar territorio uruguayo.
«Yo creía que Uruguay era una democracia tradicional. Acostumbrado a la democracia europea, creí que la aplicación de las leyes no se daba con retroactividad. A mí se me pretende acusar por una ley aprobada en 2006 sobre hechos sucedidos en 1972. Eso en Europa es impensable», dijo Amodio en una entrevista publicada hoy por el semanario uruguayo Búsqueda.
El pasado 7 de agosto, este casi octogenario, que integró el Movimiento de Liberación Nacional Tupamaros (MLN-T), guerrilla que combatió en Uruguay a Gobiernos constitucionales y a la dictadura en las décadas de 1960 y 1970, llegó a Montevideo por vez primera en cuatro décadas con su nombre real.
Al poco de arribar, recibió dos denuncias que le acusan de complicidad en la detención y tortura de personas durante la dictadura, que se unen a otra causa abierta en 2011, en la que varias expresas políticas denunciaron abusos y torturas, en el marco de la cual varios militares nombraron a Amodio de forma voluntaria.
«Ninguna de las mujeres que yo conocí está en esa lista de denunciantes», matizó tras señalar que «esa misma noche», la de su llegada, se inventaron dos denuncias «cuyo contenido es falso» y sobre cuya base le han tenido «retenido hasta el día de hoy».
«Yo creí que viajar a Uruguay a presentar un libro era un hecho absolutamente lícito, porque yo no tenía cuentas pendientes ni con la Justicia ni con la policía», explica Amodio en la entrevista, en la que asegura que «bajo ningún punto de vista» se esperaba lo que le está sucediendo.
Amodio es considerado un traidor por los exmiembros del MLN-T debido a que los militares que tomaron el poder en un golpe de estado en 1973 le concedieron un salvoconducto y un pasaporte con el nombre de Walter Barbosa para que se exiliara en España a cambio de colaboración el año en el que accedieron al Gobierno.
Respecto a esto, acepta su colaboración «en los términos que están planteados» en el libro «Palabra de Amodio», y dice que si le hubiesen pedido más colaboración «quizás lo hubiese hecho, dada la situación en la que estaba», ya que argumenta que los líderes tupamaros le habían condenado a muerte.
Actualmente se espera que se pronuncie la fiscal del caso y que con base en eso la jueza tome una decisión, que no se descarta, en el caso de ser procesado judicialmente, sea la de prisión preventiva.
«Yo tengo que confiar en la Justicia uruguaya. Porque si no confiara, ¿qué hago? Yo confío en que la fiscal pida el archivo del caso porque no hay elementos para imputarme nada», confió Amodio.
El extupamaro reconoció no estar preparado para ir a la cárcel.
«Yo tendré que buscarme la vida. Pero preso no voy a ir. Iré viendo el panorama y en su momento tomaré la medida que crea necesaria. Pero no voy a adelantarla», remarcó.
En cuanto a otra denuncia que recibió por entrar a Uruguay con una identidad falsa -Walter Barbosa- destacó que «está archivada» y que su pasaporte está retenido «a instancias del Ministerio del Interior, como escribió la jueza».
«Espero que me lo devuelvan porque es un documento legal español que no tiene nada que ver con la situación del Uruguay. Si no me lo devuelven, incurrirían en una ilegalidad. Yo espero que España certifique nuevamente que a todos los efectos soy ciudadano español. Y digo ‘nuevamente’ porque ya lo hizo en estos días, cuando saltó toda esta parafernalia que se montó aquí», aseveró.