jueves, 16 de julio de 2015
Gobierno uruguayo fijará en 538 dólares el salario mínimo a partir de 2019

Montevideo, 15 jul (EFE).- Ernesto Murro, ministro de Trabajo y Seguridad Social de Uruguay, anunció hoy que el Gobierno fijará en 15.000 pesos uruguayos (538 dólares) el salario mínimo a enero de 2019, una de las reivindicaciones de la central sindical uruguaya, PIT-CNT, que rechaza los actuales 10.000 pesos de sueldo mínimo.
Por su parte, el subsecretario del Ministerio de Economía, Pablo Ferreri, expresó que la política de sueldos del Gobierno pone «un énfasis bien importante en los salarios más bajos, más sumergidos» que ganan menos de 15.000 pesos por 44 horas semanales de trabajo.
«Esta franja ocupa a unos 426.000 puestos cotizantes, aproximadamente el 25 % de los trabajadores del Uruguay (…) que tendrán un aumento por encima de las pautas básicas fijadas por el Gobierno», indicó Ferreri en una conferencia de prensa destinada a explicar la posición del Gobierno en la actual ronda de negociación salarial.
El PIT-CNT convocó a una huelga general el 6 de agosto, la primera durante el actual período de gobierno, para protestar contra la política salarial de la administración del presidente Tabaré Vázquez.
A inicios de este mes, el Gobierno anunció las propuestas salariales para la negociación colectiva que deben llevar adelante empresarios y empleados y comunicó que las mismas serán aplicadas tal cual fueron presentadas en el caso de que las partes no lleguen a un acuerdo.
Sin embargo, con lo anunciado hoy por el Gobierno, la medida de protesta «se mantiene en todos sus términos», expresó el dirigente sindical Marcelo Abdala.
Abdala indicó que «hay un movimiento» por parte del Ejecutivo, que es aún «insuficiente con respecto a los planteos» que la central gremial hizo.
El exponente del PIT-CNT dijo que la central ha planteado «la necesidad de incluir inflación, correctivos anuales, que la gente pueda elegir entre un ajuste anual o semestral y que se pueda negociar un margen de crecimiento a nivel de las distintas ramas (de actividad)» al momento de negociar los salarios.
«Se abre ahora una fase (…) para generar las mejores condiciones de negociación colectiva. (…) Para nosotros hay una sola preocupación: el desarrollo de puestos de trabajo y que los mismos se hagan desde un punto de vista de la mejora de la calidad de vida de los trabajadores», dijo el sindicalista.
Tanto Ferreri como Murro subrayaron que si los aumentos negociados por empresarios y trabajadores están por encima de lo pautado por el Gobierno, la diferencia entre el incremento recomendado y el acordado no podrá trasladarse a los precios y tarifas.
En Uruguay, la negociación salarial se realiza dos veces en cada legislatura y de manera tripartita, con representantes del Poder Ejecutivo y de trabajadores y empresarios de cada actividad económica.
Estos acuerdos colectivos fueron suspendidos en 1992 durante el mandato de Luis Alberto Lacalle Herrera, del conservador Partido Nacional, y restablecidos en 2005, con la llegada a la Presidencia de Tabaré Vázquez, del Frente Amplio, la coalición de izquierdas al mando de Uruguay desde entonces.
Actualmente se desarrolla la sexta ronda de la negociación salarial.