Montevideo, 12 nov (EFE).- La media jornada de paro convocada para hoy por los sindicatos uruguayos en reclamo de subidas salariales y otras reivindicaciones no afectó significativamente la actividad del país y se desarrollo sin incidentes.
El paro parcial, el tercero de este año, se llevó a cabo desde las 12.00 horas hasta las 16.00 GMT y el programa incluyó una marcha de trabajadores por el centro de la capital.
El PIT-CNT, la principal central sindical del país, convocó el paro para reclamar mejoras salariales, la asignación de un 6 % del producto interior bruto para la educación, mayor inversión pública y la aprobación de una ley de empleo para personas con discapacidad.
Los dirigentes sindicales rechazaron en una proclama leída frente a la Bolsa de Valores de Montevideo la posibilidad de que Uruguay se sume al Acuerdo Comercial Transpacífico.
Además, manifestaron su apoyo al candidato oficialista a la presidencia argentina Daniel Scioli, ya que según dijeron, por más «diferencias» que tengan con él, «no es lo mismo (que Mauricio) Macri y la derecha reaccionaria» del país vecino.
El ministro de Economía de Uruguay, Danilo Astori, manifestó su «respeto» por las exigencias salariales de los sindicatos, aunque expresó que es precisa «voluntad» de todos los actores para alcanzar «coherencia y cohesión» entre la «política monetaria, cambiaria, fiscal y de ingresos» del país.
A pesar del paro y la marcha de trabajadores, la jornada laboral en la capital uruguaya transcurrió de manera normal.
Ana Laura Fernández, de la Cámara Nacional de Comercio y Servicios (CNCS), dijo a Efe que el paro no tuvo «grandes repercusiones» y más bien se trató de un «acto político de un sector en particular» sin efectos directos en el comercio.
Del mismo modo, el transporte colectivo de la capital uruguaya, donde vive la mitad de los 3,3 millones de habitantes del país, funcionó con normalidad, ya que los sindicatos de ese sector adhirieron a la medida aunque no paralizaron sus actividades.
En la terminal de autobuses de Tres Cruces en Montevideo y en el Aeropuerto de Carrasco, el principal del país, no hubo cancelaciones.
En la sanidad pública, el paro alcanzó apenas a algunas policlínicas de Montevideo y la operativa en los principales hospitales públicos se desarrolló sin inconvenientes, indicó a Efe un portavoz de la Administración de Servicios de Salud del Estado (ASSE).
La actividad en la sanidad privada, uno de los sectores en los que se esperaba mayor repercusión, se vio afectada aunque no se suspendió por completo.
En la enseñanza, hubo clases en las escuelas primarias, ya que la Federación Uruguaya de Magisterio decidió no parar aunque apoyó la medida.
No obstante, Fernando Pereira, presidente del PIT-CNT, calificó el paro de hoy como «uno de los más grandes de la historia».
«El movimiento sindical en su independencia es capaz de discrepar y de seguir planteando que los cambios no se detengan. Es (pedir) mayor presupuesto educativo, salud de calidad, negociación colectiva extendida y convenios que mejoren la calidad de vida de los trabajadores que ganan 15.000 pesos (500 dólares) o menos», expresó a la prensa Pereira.
Según un estudio del Instituto Cuesta Duarte, vinculado al PIT-CNT, en 2014 unos 690.000 trabajadores uruguayos percibieron remuneraciones líquidas mensuales por debajo de los 15.000 pesos, lo que representaba un 41,5 % del total de ocupados.
A lo largo de 2015 han sido continuos los paros y protestas, entre otros sectores, en la educación y la salud, que también reivindican principalmente mejoras salariales.