Montevideo, 16 jul (EFE).- El que fuera capitán del equipo uruguayo que obró el ‘Maracanazo’, Obdulio Varela, fue homenajeado hoy en la localidad de Pando (sur del país) con una escultura que reivindica su figura cuando se cumplen 65 años de aquella gesta deportiva.
El 16 de julio 1950 Uruguay conquistó el segundo Mundial de su historia después de vencer por 2-1 en el estadio de Maracaná a Brasil cuando los anfitriones daban por hecho el triunfo.
Con goles de Juan Alberto Schiaffino y Alcides Edgardo Ghiggia, y bajo la batuta de Obdulio Varela, responsable de alentar y mentalizar a sus compañeros, Uruguay firmó la que hasta ahora es la mayor gesta futbolística de su historia.
«(La escultura) simboliza la reivindicación a quien nos dejó un legado inconmensurable en la formación de la identidad de los uruguayos», expresó el actual seleccionador de la Celeste, Óscar Washington Tabárez, presente en el homenaje.
«Cuando me invitaron a participar sentí cierto desasosiego, porque es literalmente imposible transmitir medianamente todos los significados y todos los legados que él nos dejó en su paso por la vida y por el fútbol», agregó el seleccionador.
Tabárez destacó el pensamiento solidario del jugador y su afán de defender y exigirle al compañero, aspectos que afirmaron «sus rasgos de liderazgo en todos los ámbitos».
La obra fue elaborada por la Asociación de Artistas Plásticos de Pando y por la Municipalidad de la ciudad.
Según el representante de la asociación artística, se trata de una obra «abstracta, simbólica y constructiva» que representa «la impotencia de que se puede» a través de la representación del gesto de «la pelota bajo el brazo» ante la adversidad deportiva.
Por su parte, el alcalde de la localidad, Alcides Pérez, manifestó que Obdulio Varela representa que los uruguayos son trabajadores y capaces de lograr la unidad en las situaciones más difíciles.