Montevideo, 4 ago (EFE).- El Gobierno uruguayo valora el TISA, un acuerdo internacional que se está negociando para la liberalización del sector de los servicios, como una oportunidad para «tener mejor acceso» a otros mercados y fomentar sus exportaciones, señaló hoy en Montevideo el canciller del país, Rodolfo Nin Novoa.
Las exportaciones uruguayas sufrieron una caída del 14,2 % entre enero y julio de 2015 respecto al mismo periodo del año anterior y el canciller señaló que este «desplome» se debe a que las «condiciones de intercambio se están volviendo desfavorables» para el país.
«Hoy los inversores prefieren posicionarse en otros elementos que no son las materias primas, de manera que el plan estratégico de desarrollo de Uruguay es, precisamente, participar en cosas como el TISA, que habla de la promoción y de la liberalización de los servicios, para tener mejor acceso a los mercados» agregó.
El ministro uruguayo compareció hoy ante una comisión de la Cámara de Representantes o Diputados, en la que fue cuestionado acerca del avance de las negociaciones debido al «oscurantismo» que denuncia la oposición acerca de las mismas, indicó a Efe el diputado del Partido Nacional Jaime Trobo.
Nin Novoa destacó, en declaraciones a la prensa tras salir de la reunión, que más del 64 % de las exportaciones del país tienen que ver con los servicios y por este motivo valoró que Uruguay no debe «descartar» suscribir este acuerdo internacional.
«Uruguay tiene 178 mercados abiertos para varios productos pero tiene dificultades de acceso en algunos por tasas administrativas, barreras no arancelarias, aranceles o falta de armonía en disposiciones aduaneras», señaló el ministro.
El país suramericano tiene de plazo hasta el 15 de septiembre para presentar en Ginebra, donde se está negociando este tratado, la lista de servicios que pretende incluir en este acuerdo.
Según el canciller, en el mismo se están discutiendo 17 temas y ha indicado en reiteradas ocasiones que entre los mismos no están ni la sanidad ni la educación.
Los países que participan actualmente en las conversaciones son, además, de los Estados miembros de la Unión Europea (UE): Australia, Canadá, Chile, Taiwán, Colombia, Costa Rica, Hong Kong, Islandia, Israel, Japón, Corea del Sur, Liechtenstein, México, Nueva Zelanda, Noruega, Pakistán, Panamá, Paraguay, Perú, Suiza, Turquía y Estados Unidos.
Uruguay, Paraguay y Pakistán son los únicos países que faltan por presentar sus ofertas.
El canciller uruguayo estimó que no habrá una resolución definitiva del acuerdo hasta finales de 2016 y resaltó que las negociaciones todavía están en una fase «embrionaria» ya que las conversaciones son muy «engorrosas» debido a las pretensiones individuales de los participantes.
«Incluso la UE, que son 28 países, no tiene una voz única en cada uno de los temas. Hay matices, hay diferencias que, por mínimas que sean, no estabilizan los temas del acuerdo», destacó.