jueves, 7 de enero de 2016
Jefe de patronal venezolana, «gratamente sorprendido» con ministro industrial

Caracas, 7 ene (EFE).- El presidente de Fedecámaras, la principal patronal de Venezuela, Francisco Martínez, dijo estar «sorprendido gratamente» con el nombramiento del industrial Miguel Pérez Abad, titular del gremio Fedeindustria, como nuevo ministro de Industrias.
«Estoy sorprendido gratamente con la designación de Pérez Abad, aunque esa combinación de ministros es un poco extraña, según nuestra visión», declaró el presidente de Fedecámaras a las emisoras privadas caraqueñas Globovisión y Unión Radio.
Pérez Abad forma parte desde la noche de este miércoles del gabinete ministerial del área económica del Gobierno del presidente Nicolás Maduro, que también integran otros nueve ministros, todos bajo el mando del vicepresidente para el Área Económica, y también ministro de Economía Productiva, Luis Salas.
Estos son los de Planificación, Ricardo Menéndez; Petróleo, Eulogio Del Pino; Energía Eléctrica, Luis Motta; Comercio Exterior e Inversión Extranjera, Jesús Faría; Producción Agrícola y Tierras, Wilmar Castro; Pesca y Acuicultura, Ángel Belisario; Agricultura Urbana, Emma Ortega; y Alimentación, Rodolfo Marco Torres.
«Esperamos que de esa diversidad de pensamiento (de estos diez ministros) pueda salir la luz del entendimiento para que de una vez por todas se tomen medidas urgentes que tanto está requiriendo la economía del país», remarcó Martínez a Globovisión.
En declaraciones adicionales a Unión Radio, subrayó que «todos los venezolanos esperamos ver resultados a la brevedad posible».
Para ello, sostuvo, el Gobierno de Maduro debe promover «el cese de los ataques a la propiedad privada y a todo el sistema empresarial» y el Parlamento, ahora de mayoría opositora, «cambiar diversas leyes».
Entre estas aludió a las normas sobre el régimen cambiario, «porque se requiere un sistema de divisas fluido, constante, sobre todo transparente», como también un sistema de precios «eficiente» que considere «las diferentes capacidades productivas de cada una de las empresas o sectores de empresas».
El país requiere, opinó, «hacer una revisión de todo el régimen legal», especialmente para «generar confianza y fortalecer la institucionalidad» y lograr que así, «de una vez por todas, vengan las inversiones privadas extranjeras».
Maduro rechazó el 22 de abril pasado «cualquier tipo de diálogo con Fedecámaras», que entonces le pidió desmantelar los controles estatales de cambio de divisas y de precios de los productos de consumo masivo que están en vigor desde 2003.
«Habrase visto mentalidad de gente prepotente que dice: ‘Maduro debe liberar los precios’ (…), debe liberar el cambio y entregarnos los dólares a nosotros’. ¿Los dólares del pueblo para ustedes?», se preguntó ese día Maduro a manera de rechazo.
El control estatal sobre las divisas y los productos básicos fue instaurado hace 16 años por el entonces presidente Hugo Chávez, mentor y antecesor de Maduro, tras un fallido golpe de Estado y una posterior huelga general, acciones supuestamente lideradas por los dirigentes de entonces de Fedecámaras.
Maduro le encomendó entonces al presidente de la Federación de Industriales Pequeños, Medianos y Artesanos (Fedeindustria), Miguel Pérez Abad, nombrado a inicios de 2015 «comisionado presidencial» para enlaces con los empresarios, informar a Fedecámaras de su rechazo a desmantelar los controles estatales.
Maduro acusa los empresarios asociados en Fedecámaras de secundar una «guerra económica», a su juicio propiciada por la oposición para dar al traste con su gestión, que cuenta entre sus efectos una aguda escasez de productos y su venta ilegal en el «mercado negro» o su salida como contrabando a países vecinos.
El ahora ministro de Industrias le ha recomendado a Maduro alzas de sueldos y de precios, para que sean similares a los existentes principalmente en Colombia, para apuntalar la lucha contra prácticas especulativas.