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Nélida Fernández
Caracas, 13 jul (EFE).- Un amplio operativo policial que se activó en Venezuela para desmontar varias bandas criminales que operan en el país y que hasta el momento ha dejado más de 14 supuestos delincuentes muertos y más de 200 detenidos, desvela la punta del iceberg del grave problema de criminalidad en el país.
Enmarcado en un nuevo plan de seguridad llamado Operación de Liberación del Pueblo (OLP) la actividad policial de hoy se concentró en la populosa zona del oeste de Caracas conocida como Cota 905, la también caraqueña Ciudad Tiuna y en los municipios San Casimiro, Urdaneta y Camatagua del céntrico estado Aragua.
El ministro de Interior de Venezuela, general Gustavo González, informó de las 14 muertes, de las 134 personas detenidas, 32 de ellas extranjeras, y del desmontaje de siete bandas criminales en el operativo en la Cota 905 e indicó que en otras zonas de la capital también fueron capturadas más de cien personas el fin de semana.
En el urbanismo Ciudad Tiuna, en el oeste de Caracas, agregó el ministro, la Guardia Nacional Bolivariana (GNB, policía militarizada) detuvo a 102 personas, ocho de ellas extranjeras, «también vinculadas a paramilitares».
Además de actividades ilícitas con droga, vehículos y armas, los detenidos en Ciudad Tiuna aparentemente se dedicaban al acaparamiento de alimentos que escasean en los mercados y a invadir viviendas construidas por el Gobierno, resaltó el general.
Toda esta actividad, en la que participaron más de 2.500 efectivos policiales, también llevó a la incautación de una treintena de autos, más de 20 motocicletas, más de 20 armas cortas, una media docena de armas largas y dos granadas fragmentarias, entre otras propiedades.
González indicó que el jefe de Estado, Nicolás Maduro, dio instrucciones para que este operativo se extienda a todo el país para «liberar al pueblo de las bandas criminales».
La Cota 905, un corredor vial rodeado de barrios humildes, se había convertido en los últimos meses en protagonista de noticias sobre tiroteos y enfrentamientos entre bandas criminales y policías pues, según informaciones difundidas en la prensa local, grupos de delincuentes impedían la entrada de cuerpos de seguridad a la zona.
Fue noticia reciente que comisiones policiales fueron recibidas con tiros y granadas y que fueron quemadas varias motocicletas y una patrulla de la Policía Nacional Bolivariana (PNB).
Sobre el resultado de la actividad policial en Aragua, el gobernador de esa entidad, Tareck El Aissami, informó de la captura de siete personas supuestamente vinculadas a una de las bandas criminales que operaba en la zona sur del estado.
«Hemos hechos esta gran operación, a esta hora todo el eje sur de Aragua está siendo vigilado, monitoreado con patrullaje aéreo, terrestre (…) operaciones para liberar estos territorios y devolverles la paz», dijo El Aissami a periodistas.
En Aragua, el operativo se extendió en el área donde, el 2 de julio pasado, fueran hallados los cuerpos del empresario español de 68 años Jaime Carrera, y de dos de sus empleados, secuestrados un mes antes.
El ministro de Comunas, Elías Jaua, dijo hoy en una entrevista con el canal privado Venevisión que este operativo es «un plan superior de desarticulación de las bandas criminales» y aseguró que un sector de la oposición venezolana está vinculada con bandas criminales de Caracas, una aseveración que ya ha hecho el jefe de Estado.
«Estamos actuando en este momento en la Cota 905, donde un conjunto de organizaciones criminales con vinculaciones políticas con sectores de la derecha se había ocupado de un territorio para sembrar zozobra y violencia contra la población», dijo el funcionario.
Jaua también informó de que en el céntrico estado Miranda, específicamente en la zona de los Valles del Tuy, también se activó este fin de semana este operativo en el urbanismo Ciudad Betania donde también «se habían enquistado algunos de estos grupos violentos».
Los Valles del Tuy fue escenario en abril pasado de la masacre de nueve miembros de una familia que fueron tiroteados por un grupo de pistoleros que irrumpió en una fiesta en un conjunto residencial perteneciente al programa social del gobierno, Misión Vivienda.
La inseguridad ciudadana figura en todas las encuestas como uno de los principales problemas de Venezuela, país que ostenta una tasa de homicidios de entre 62 y 82 personas por cada 100.000 habitantes, según cálculos del Gobierno y de la organización no gubernamental Observatorio Venezolano de Violencia (OVV), respectivamente.